Libros - Arul M. Arokiasamy

Vacío y plenitud
Zen de la India en la práctica cristiana

Un maestro zen dijo: «Si te encuentras con el Buda, ¡mátalo!». Sea cual sea la concepción que tengas de la realidad, destrúyela, arrójala fuera. El zen devuelve al hombre a la esencia primordial de su ser y lo desnuda de todos los subterfugios egoístas que utilizamos para manipular la realidad y la verdad. Exige vaciarse radicalmente de uno mismo, vaciamiento que nos remite a la vida de Jesús. El zen no es una filosofía, un dogma o un ritual, sino la experiencia de vacío manifestado como ser uno con todos y cada uno de los seres. Este caer en la cuenta se confirma y transmite en la relación maestro-discípulo. Por eso lleva al hombre al corazón de la verdadera religión de una forma única y tiene mucho que ofrecer al cristianismo.

Arul Maria Arokiasamy (1936), jesuita introducido en el zen por H. M. Enomiya-Lassalle, recibió su reconocimiento como maestro zen de Yamada Koun Roshi. Desde 1982 enseña zen en un ashram de Madrás. / Más información