Extractos - Roberto Mallón Fedriani
"Viveka Suda Mani" -- Sri Shankaracharya
Introducción
Por Roberto Mallón FedrianiSon varias las traducciones al castellano que se han llevado a cabo hasta la fecha de esta excepcional obra. No obstante, la particularidad de esta versión que presentamos radica, en primer lugar, en venir acompañada de los comentarios de un Maestro Tradicional viviente de la escuela Vedanta Advaita: "Dravidacharya", Sri Ramakrishnan Swamiji. En estos comentarios, Dravidacharya aprovecha para acercar al lector a los conceptos fundamentales del Vedanta así como para aclarar confusiones habituales que a su entender han venido cometiendo a lo largo de los años diversos autores (en especial en las traducciones de origen anglo-sajón) (1) En segundo lugar, el Swamiji incluye una traducción palabra por palabra de la sloka o verso original sánscrito; traducción que si bien no pretende ajustarse a criterios filológicos estrictamente académicos, nos muestra el significado de cada término y da paso con ello a comentar aquellos conceptos que merecen aclaración, así como a llevar a cabo interesantes desarrollos doctrinales.
Es sabido que la autoría de este Viveka Suda Mani ha provocado muchos debates en determinados círculos eruditos. Si bien por norma general se atribuye al gran maestro y fundador de la escuela Vedanta Advaita, Sri Shankaracharya, hay quienes opinan que el estilo utilizado no se correspondería con el suyo habitual, además de que en el penúltimo verso o sloka se cita un autor con el nombre de "Sri Shankara Bharati". Respecto a la primera cuestión parece haber bastante consenso. Sin embargo, respecto al supuesto autor del texto no queda del todo claro, ya que el sobrenombre de "Bharati", además de ser utilizado desde los mismos orígenes del Vedanta por múltiples maestros vedánticos, su significado es "palabras de ... ". Sea como fuere, desde el punto de vista del "buscador espiritual", es completamente irrelevante la individualidad del que fuese autor de esta maravilla del Vedanta Advaita. De hecho, entre los propios representantes de la Tradición Viviente de los Himalayas, se acepta la posibilidad de que pudiera haber sido escrita por un discípulo vedantín y que el propio Shankaracharya la firmase, lo cual ―de ser cierto― no restaría para ellos ninguna importancia a esta obra monumental de la metafísica hindú. Es reconocido en todos los ámbitos que fuese quien fuese el autor, estamos ante un verdadero iluminado, "Realizado" o "Liberado en vida" (Jivanmukta) con una claridad de pensamiento absolutamente excepcional, a juzgar por la síntesis magistral que aquí se lleva a cabo. Este carácter excepcional ha llevado a que algunos hayan llegado a afirmar que Viveka Suda Mani constituye suficiente base doctrinal como para alcanzar el estado de Realización o Liberación (Moksha), no necesitándose ―eventualmente― más estudios en la materia. No obstante ―y como bien indica el Maestro Dravidacharya― si bien se trata de una síntesis extraordinariamente lúcida, es más cierto que esta obra arroja toda la luz que contiene solo sobre aquellos que han estudiado y comprendido con anterioridad y debidamente ―es decir, de boca de un maestro Realizado― las demás Escrituras o Shastras (Upanishads, Bhagavad Gita, Brahma Sutras, etc.).
Sri Ramakrishnan Swamiji Dravidacharya reside en la actualidad en la mítica ciudad de Rishikesh (estado de Uttarakhand, India) situada en la ribera del Ganges y a los pies de los Himalayas. Si bien su origen es la ciudad de Chennai, desde muy joven se dirigió a Rishikesh en búsqueda del Conocimiento Último. Allí fue iniciado en las enseñanzas del Vedanta Advaita por varios maestros tradicionales. Entre ellos destacan Swami Shanti Dharmananda Sarasvati, que prologa esta obra y que fue discípulo de Swami Satyananda Sarasvati, quien, a su vez, fue discípulo del famoso Swami Sivananda. El incontestable linaje espiritual (o gurú parampara) de Dravidacharya, se completa con otros maestros como Swami Sri Sarveshananda Sarasvati, Sri Sreenivasa Tatthachari, o Sri Raghu Rama Sharma.
Por indicación de sus propios Gurús, en la actualidad Dravidacharya imparte en Rishikesh sus enseñanzas sobre Vedanta Advaita (Upanishads, Brahma Sutras, Bhagavad Gita, Panchadasi, Naishkarmyasiddhi, Advaitasiddhi, etc.) y sobre los demás Darsanas o "puntos de vista doctrinales" del hinduismo (Samkhya, Nyaya, Yoga, Mimansa, Vaisheshika); todo ello en círculos muy reducidos de buscadores sinceros (2). En general, el enfoque de la transmisión podría denominarse "Vedanta a través de los Shastras"; método seguido durante siglos por los maestros tradicionales en donde lo que se persigue es que el buscador reciba de boca de su maestro un conocimiento profundo y sólido de la doctrina de la Verdad Última o Conocimiento de Brahman (Brahmavidya); generar una certeza interior que posibilite, en la medida de las predisposiciones de cada buscador, la "Realización espiritual a través del Conocimiento" (Jñanamarga).
Conviene aclarar que en todo el texto que presentamos se usa el término "Sí Mismo" (del inglés Self) para referirse al principio absoluto trascendente denominado en los Vedas "Brahman", y que no hay que confundir con "Brahma" o aspecto Creador de la Trinidad o Trimurti "Brahma-Vishnu-Shiva”. Por otro lado, se utiliza la expresión "sí mismo individual" para referirse al mismo principio absoluto pero visto desde su aspecto inmanente, coincidiendo con el término védico "Atman". Éste está aparentemente "revestido" con el conjunto de atributos o "envolturas" individuales dando lugar a la ilusión del "Jivatma" ("alma individual" o "alma viviente"). En última instancia. "Atman" coincide con "Brahman", y esta Identidad trascendental, intelectualmente "fácil de captar" pero muy difícil de realizar, constituye la síntesis final de la doctrina Vedanta Advaita a la que todo ser humano debe aspirar con el fin de llevar a cabo el propósito más elevado de su vida.
Por último, señalar que la numeración de las slokas de la presente traducción está basada en la versión tradicional del texto utilizada por el Swamiji que ―tal y como él mismo nos indica en sus comentarios― incluye algunas slokas no contenidas en otras ediciones. Por otro lado, se dan determinados criterios de agrupación de las mismas elegidos por él mismo de cara a una mejor comprensión del significado por parte del lector. Ambas cosas conducen a que pueda no existir una correspondencia exacta en la numeración de los versos, tal y como aquí se presentan, con otras versiones de la obra. No obstante, esto no representa ningún obstáculo para aquellos que deseen llevar a cabo estudios comparativos, pues incluimos la transliteración occidental del texto original sánscrito.
Agradecemos desde aquí a Sri Ramakrishnan Swamiji Dravidacharya la inmensa ayuda que nos ha proporcionado con su profunda sabiduría.