Enrique Ribeaux Roig
Somos Eso
Por Enrique Ribeaux Roig 22 de julio de 2017Hay algo permanente afuera y algo permanente adentro. Los dos son la misma cosa. Lo que es permanente afuera es Brahman, y lo que es permanente adentro es la conciencia testigo. Brahman y el testigo son uno.
Las cosas que se manifiestan en el espacio externo son impermanentes, es decir, surgen y desaparecen. No hay una cosa permanente en el mundo externo. Sin embargo, existe un substrato, eso de lo cual están hechas las cosas, que sí permanece. Ese substrato es lo real, lo único real, en el espacio externo. Eso desde lo cual surgen las cosas y en lo cual se desaparecen, es lo verdadero, lo realmente existente, como el barro en los distintos jarrones, o el oro en las distintas joyas.
En el espacio interior, también existe algo permanente: el testigo. Este testigo es lo único real en el mundo subjetivo; es lo que permanece más allá de la vigilia, el sueño con sueño y el sueño profundo. Los varios estados de conciencia, van y vienen, pero la conciencia de estos estados permanece sin cambios. No surge, no se desvanece, esto solo sucede con sus estados, pero no con la conciencia en sí misma; así como el hielo, el líquido y el vapor cambian entre uno y otro, pero el agua, lo cual es el substrato en los tres, permanece siempre la misma: H2O.
El substrato del mundo interior y el substrato del mundo exterior ―que como ya se definió es aquello que no cambia en ninguno de los dos― son una misma cosa. Lo permanente adentro es lo mismo que lo permanente afuera. No existe una dualidad sujeto-objeto. No hay separación. Lo real del mundo interior es lo real del mundo exterior.
En el sueño profundo, el aquí afuera y el aquí dentro se funden en solo Aquí. Pero no soy consciente de esto porque, al estar identificado con el pensador, si el pensador no está presente, yo tampoco lo estoy. En cambio, si lograra identificarme con aquello que observa al pensador, en lugar de desaparecer junto con él, observaría su desaparición, observaría que ya no hay nada ahí, o aquí. Ahora solo hay un Aquí vacío de manifestaciones. Y en este Aquí desierto, solo existo Yo. Yo soy ese Aquí.
En cierta ocasión, experimenté estar presente antes del Big Bang, en la forma de una conciencia desnuda; y luego vi cómo evolucioné desde las primeras partículas hasta este cuerpo humano, para finalmente despertar y reconocerme a mí mismo como conciencia. En este despertar, me di cuenta de que yo soy todo lo que existe, sin distinción de nada. Soy eso en lo cual el universo aparece y desaparece, y soy eso en lo cual la mente surge y desaparece. Soy lo permanente. Soy lo que verdaderamente existe más allá del tiempo y el espacio. Soy eterno (sin tiempo) e infinito (sin espacio). Tú también lo eres. Tú y yo somos Eso.