Extractos - John David

Quizá tenemos la idea de que podríamos transformarnos en algo distinto, algo un poco mejor, pero ¿qué puede ser más sencillo que "ser como eres"? Sin embargo, nos resulta casi imposible, porque la mayoría estamos divididos contra nosotros mismos.

Hay una parte, probablemente la que nos trae a un retiro de meditación o la que nos lleva a admirar una puesta de sol, que se puede comparar a una conexión inalámbrica o a un sistema de navegación. Esta parte está conectada a un gran satélite en algún lugar, ahí arriba, que llamamos Dios o existencia y que nos guía paso a paso por nuestras vidas. A veces llegamos a estar en armonía con eso y, por unos momentos, sentimos una profunda sensación de paz y unidad; como si, de repente, todo fuera tal y como debe ser. Lo llamamos una experiencia espiritual, pero lo que sucede es que, simplemente, estamos siendo en ese momento lo que de verdad somos.

Desafortunadamente, la mayor parte del tiempo nos identificamos con la otra parte, nuestra historia, basada en un personaje que llamamos "yo". Esta historia se ha vuelto muy familiar con los años. Se creó imperceptiblemente y, al identificarnos con ella, nos separamos de nuestra verdadera naturaleza. La realidad de nuestra historia es que hemos sido condicionados contra nosotros mismos.

Cuando estabas creciendo, te decían a menudo que los sentimientos que tenias no eran admisibles. Quizá tu madre te mandaba a jugar cuando lo que tú querías era estar con ella. Pero te ibas a jugar, te lo pasabas muy bien y volvías todo sucio y lleno de barro. Entrabas en casa y ella se enfadaba porque ¡eras un desastre y no habías tenido cuidado! Puede parecer muy normal y no demasiado importante, pero, a un niño sensible, esta misma historia repetida una y otra vez puede afectarle profundamente. Puede crecer con una sensación de separación, de estar siempre dividido.

Para ser tú mismo tienes que reconocer esta división y cuando, por ejemplo, sientas venir las lágrimas, aceptarlas. Si sientes rabia, acepta la rabia; si te sientes desgraciado, acepta la infelicidad; si te sientes triste, acepta la tristeza. Permítete a ti mismo ser, con una aceptación total, porque no puedes estar equivocado. Cuando aceptas lo que es, cambia rápidamente a otra cosa.

El ser como eres te ha sido dado, no tienes que hacer nada. Ni siquiera tienes que meditar. Por supuesto, el pasar tiempo sentado en silencio te será de gran ayuda, pero entonces acepta lo que es. Acepta los pensamientos, acepta los sentimientos. La alternativa es mantener la dualidad de ser alguien, y eso cuesta mucho trabajo.

Ramana Maharshi solía decir, "Sé como eres". Nunca dijo, "Sé como yo" o "Sé como ese de ahí". Lo que dijo es, "Sé como eres". De hecho, ¿qué otra cosa puedes hacer? Incluso aunque te pases la vida intentando ser alguien diferente, al final te darás cuenta de que solo puedes ser como eres. No hay otra posibilidad. Y de todas maneras, si la existencia hubiera querido que fueras otro, probablemente lo serías. Pero quería que fueras como eres. Es una invitación maravillosa.

La mayoría nos pasamos la vida juzgándolo todo y decidiendo si algo nos gusta o no. Imagina que llega la muerte y llama a tu puerta: "Bueno John, ¿has decidido ya las cosas que te gustan y las que no? Ahora te tienes que venir conmigo". ¿A quién le importa? No tiene ninguna importancia y es una pérdida total de tiempo.

Si prescindimos de nuestros juicios, la vida aparece tal y como es. ¡Eso es todo! Incluso cuando descubres todas las cosas que te gustan y todas las que no, la vida seguirá trayéndote cosas que te gustan y cosas que no. Nada va a cambiar solo porque sepas lo que prefieres. Y mientras tanto, nunca vas a estar satisfecho.

Cuando estamos preparados para aceptar lo que suceda y lo que encontremos dentro, los juicios se abandonan y podemos celebrar cualquier cosa que la vida nos traiga. Vemos el paraíso en la vida corriente.

Vislumbrar la posibilidad de paz real es un gran momento. ¿Qué es la paz? Es aceptar lo que hay. En realidad, es muy simple. Nunca vas a poder cambiar las cosas, así que es mejor aceptarlas. Todo es ya como debe ser. "Sé como eres" apunta a la posibilidad de alcanzar una profunda armonía interior, sin divisiones. Todavía sigues siendo un individuo, pero, simplemente eres, momento a momento.

Estás en este planeta para ser grande, magnífico, para ser quién eres y manifestarlo en el mundo. Haz tu papel, sea el que sea, no es tan difícil. Solo tienes que recordar quién eres, rendirte a ello y confiar.