Extractos - J. Krishnamurti

Reflexiones sobre el yo es una indagación sobre el ser humano y una invitación a un cambio radical urgente en la conciencia como única posibilidad para trascender el conflicto interno y externo que vivimos como individuos y como humanidad.

Krishnamurti reflexiona aquí sobre las características fundamentales del ego, como son el miedo, la soledad, la autoridad, el descontento, la culpa y la naturaleza del "yo", entre otras. Su propósito es ayudarnos a comprender la peculiar estructura psicológica humana que, por su propia naturaleza, distorsiona la realidad y crea la escisión entre el "observador" y "lo observado". Esta visión escindida de la realidad da origen al sentimiento de separación y constituye la fuente de todo sufrimiento.

Según Krishnamurti, solo una transformación radical en la conciencia humana puede trascender estas estructuras mentales distorsionadas que tanto nos limitan.

Esta obra recoge una selección especial de textos y charlas de J. Krishnamurti que permiten que nos adentremos en la conciencia humana desde la observación pura y directa que caracterizan a este maestro y que le diferencian de los filósofos teóricos. Los textos han sido recopilados por Raymond Martin, profesor de filosofía de la Universidad de Maryland, EE.UU., quien también realiza una inteligente y acertada introducción de los mismos.

Extracto de la Introducción

¿Es posible vivir sin depender psicológicamente de una autoridad, sea una autoridad externa o, incluso, la autoridad de nuestra propia experiencia? Para Jiddu Krishnamurti, una vez definido correctamente, este es el tema central. Él responde que eso es posible y que solo así uno puede conectar plenamente con lo real.

Krishnamurti no fue un filósofo en el sentido clásico. No le interesaba presentar teorías o argumentos a favor de sus puntos de vista. No obstante, lo que propone tiene relación con la filosofía. Como Sócrates, que mediante el ejemplo y el cuestionar animaba a sus interlocutores a examinar críticamente las suposiciones en las que se sostenían sus creencias, Krishnamurti, mediante el ejemplo y el cuestionar, anima a sus interlocutores a examinar de forma crítica las suposiciones de las que resultan las experiencias que tienen de sí mismos y del mundo. En otras palabras, mientras Sócrates promueve lo que hoy llamamos "pensamiento crítico", o simplemente "filosofía", Krishnamurti promueve lo que podemos llamar "el mirar crítico", al que con frecuencia se refería como "el darse cuenta sin elección".

Más que un teórico , Krishnamurti fue un sabio y un maestro. Entre las cosas que dijo ver, está la inherente distorsión en las estructuras psicológicas que genera una división en la conciencia de casi todas las personas, la división entre el observador y lo observado. Esta división, según él, es una poderosa fuente de conflicto, un conflicto interno para el individuo, que se expande al conjunto de la sociedad a través del mismo individuo. Krishnamurti también propone una forma de eliminar estas estructuras dañinas o, más exactamente, facilitar su eliminación. De eso tratan las selecciones de este libro: de una transformación radical en la conciencia humana.

Es mucho más lo que Krishnamurti expresó en público que lo que dejó escrito. Sus charlas públicas ―de donde proviene casi todo el material seleccionado en este libro― no eran conferencias sino, más bien, un intento de entablar un diálogo con sus oyentes, en el cual él y los demás se centraran por completo en algún aspecto de la experiencia o de la conducta. Sus charlas públicas eran, en realidad, meditaciones directas; es decir, intentos de Krishnamurti de experimentar un proceso vivencial junto con sus oyentes, con usted, en donde algo se aclara al comprender la propia experiencia de uno y los efectos que tiene en la conducta. De hecho, las charlas públicas aquí transcritas y publicadas como si fueran escritos generan necesidades inusuales al lector, en especial si el lector es un filósofo acostumbrado a buscar una conclusión teórica, al leer algo que parece postular puntos de vista filosóficos. Con el pensamiento de Krishnarnurti, más que conclusiones teóricas, se produce una apertura a la importancia de la percepción directa; por ejemplo, percibir la naturaleza del proceso de identificación y su papel en la creación del 'yo'. Krishnamurti sugiere que para tener estas percepciones directas uno debe mirar sin cargas.

Jiddu Krishnamurti (1895-1986) fue un maestro espiritual único y revolucionario que viajó e impartió charlas públicas por todo el mundo hasta su muerte, a los noventa años de edad.
No ofrecía una filosofía, sino la posibilidad de que el ser humano se liberara de todos los sistemas, de las cadenas de las ideologías, de las opiniones, de los conceptos, de las religiones organizadas, de la tiranía del pensamiento y de la tradición.
Dejó establecidas cuatro fundaciones para preservar y difundir sus escritos, charlas, entrevistas, etc., y bajo el amparo de las fundaciones creó escuelas para niños y jóvenes. / Mas info