Extractos - Roy Whenary
¿Por dónde empiezo?
Por Roy WhenaryUna de las frases más importantes del Advaita, derivada de las enseñanzas de Ramana Maharshi, es la pregunta "¿Quién soy yo?". Pero como todas las frases tan repetidas, la mente rápidamente se acostumbra a ella y deja de responder de una manera significativa a la pregunta. El hecho es que no es una pregunta que necesite una respuesta intelectual. En realidad, no necesita ninguna respuesta en absoluto, porque la mente no puede describir adecuadamente lo que se siente. Las palabras no son suficientes.
Se puede estimular la mente para vislumbrar cosas de las que normalmente no es consciente, pero para crear un cambio importante en la consciencia, es poco probable que suceda repitiendo una pregunta, frase o mantra. La mente o intelecto, por sí sola no es el mecanismo que pueda hacer esto.
Para hacer la pregunta "¿Quién soy yo?" tenemos que estar realmente en un modo de escucha, de recibir, de sentir ― no tratando de conseguir respuestas que satisfagan la mente Pero también podemos cambiar la pregunta y preguntar tal vez, "¿qué es esta vida?", "¿qué es este Ser que hace esta pregunta? ". Cuando miramos nuestra vida, ¿qué vemos?
Cuando alguien me pregunta cuándo y dónde nací, tengo una respuesta instantánea que ha estado en mi mente durante tanto tiempo como puedo recordar. Pero ¿dónde empiezo realmente? ¿De dónde surge esta consciencia individualmente consciente? ¿Dónde estaba yo antes de mi aparente nacimiento, y donde voy a estar después de mi muerte?
Vivimos una vida, la que sea, durante quizás setenta, noventa o cien años, muy implicados en nuestra propia historia individual. ¿Pero, qué significa? En el gran vasto océano de la existencia, ¿qué significa "mi" vida? Puedo ser un gran deportista, un famoso cantante o un barrendero. Puedo ser un rey o una reina, un presidente, un primer ministro o un famoso escritor. Puedo ser un sabio iluminado. Pero, ¿qué significa todo esto? No podemos aferrarnos a estas identidades.
En lo que se refiere al universo físico solamente, diez mil o cien mil años de civilización humana es como nada. Nos centramos en nuestras vidas en cuestiones tan insignificantes. Cuando nos fijamos en los grandes logros de la antigua China, India, Egipto, Grecia, Roma y luego miramos a nuestra propia era moderna, ¿qué hay que dure? Absolutamente nada en absoluto.
Esos nombres de la historia que significan tanto para nosotros hoy, como Jesús, Buda, Shakespeare, Da Vinci, Einstein, son como invenciones de la imaginación, que pasan por nuestras mentes en alguna nada desconocida. Habrá otros nombres, otras civilizaciones, otros grandes líderes en el mundo del arte, la ciencia y la espiritualidad, pero también pasarán.
Lo que importa en esta vida es ― ¿sabes quién o qué eres? Si no lo sabes y si no tienes ni siquiera un indicio de ello, aparte de dar un nombre y dirección, entonces pasarás gran parte de tu vida en la confusión psicológica y emocional, el tedio o el sufrimiento. No importa quien crees que eres, si lo que crees que eres viene sólo de la memoria y la imaginación.
Si realmente te detienes, y dejas que tus pensamientos se relajen y sientes el vacío silencioso que permanece, que subyace en todos tus pensamientos y actividades, te encontrarás cerca de saber quién eres. Pero ese conocimiento no es un pensamiento o un conocimiento basado en la memoria ― es un saber que viene de la sensación, la textura de tu Verdadero Ser. Por supuesto, la mente entonces viene y trata de explicarlo intelectualmente, pero todo lo que se le ocurre se queda corto. Simplemente no puede captarlo. Incluso los grandes filósofos y matemáticos nunca entenderán esto simplemente tratando de crear conceptos y ecuaciones al respecto. Tiene que ser sentido.
Cuando vivimos nuestras vidas en la sensación, en lugar de en el pensamiento, estamos realmente en contacto con la realidad. Pero no hay límites a esa realidad, por lo que nunca puedes realmente decir "él está iluminado" ― como si la iluminación fuera algún tipo de objeto con limitaciones o demarcaciones, algún tipo de meta que se puede lograr o ganar. ¿Y quién está ahí para lograrla o ganarla de todos modos?
¿Te acuerdas de cuándo naciste? Se dice que podemos ser llevados de vuelta, a través de la hipnosis, hasta cuando nacimos, e incluso a vidas anteriores. Pero ¿hasta dónde queremos volver? Hay una eternidad detrás y por delante de nosotros. ¿Qué sentido tiene llegar a conclusiones intelectuales acerca de esas cosas si ni siquiera estamos presentes en esta vida actual? Y nunca podemos estar presentes en esta vida, si estamos ocupados continuamente con nuestros pensamientos y emociones individuales y personales.
¿Te acuerdas de cuando viniste a la existencia? ¿De dónde surgiste? Cuando fuiste a dormir la noche anterior y te quedaste dormido profundamente, ¿Adónde fuiste? Cuando te sientas en meditación y te alejas del mundo del pensamiento hacia el puro Ser, la pura sensación, ¿Adónde vas? Ninguna respuesta será siempre suficiente. ¿Estás ausente en el sueño profundo, en la meditación? ¿O es simplemente que los pensamientos, emociones y recuerdos que se adhieren a tu forma física están ausentes en esos momentos?
No tenemos ninguna manera de describir lo que somos en ausencia de pensamientos, emociones y recuerdos ― aparte de decir que somos "conciencia", "presencia consciente" o tal vez que nos encontramos en nuestro "estado natural", en nuestro "ser verdadero". Las palabras nunca pueden describir y nunca serán capaces de describir, porque las palabras sólo tienen significado y valor en términos de dualidad, en el mundo de las relaciones sujeto-objeto.
Las palabras pueden señalar la insuficiencia de ver el mundo dualísticamente, y así posiblemente abrirnos para poder dejar atrás nuestros pensamientos, emociones y recuerdos. No podemos, sin embargo, entrar en la realidad, en la no-dualidad, aunque podemos dejar de entrar en la dualidad. Cuando vemos a dónde nos lleva el pensamiento y la emoción en nuestra vida, simplemente dejamos de darles tanta importancia. Cuando nos damos cuenta, a través de vivir desde el vacío silencioso de nuestro verdadero ser, de la riqueza que se encuentra ahí, no necesitamos intentar perpetuarlo, porque entendemos que cualquier modo de agarrarlo lo mata. Así aprendemos a vivir y a aceptar cualquier estado en que nos encontramos, sabiendo que soltando el agarre, también vamos a encontrarnos a nosotros mismos más profundamente en la sensación, en la plena comprensión de lo que es esta vida y lo que somos.
Y todo esto ocurre sin el pensamiento, en el vacío silencioso de nuestro verdadero ser. Así que, ¿por dónde empiezo? Sencillamente, no hay una respuesta que valga la pena. Si nos fijamos en los elementos de la naturaleza, ¿acaso pregunta el viento de dónde surgió por primera vez, y pregunta el agua cómo empezó a fluir por la corriente? Nada es permanente, nada permanece igual, todo es fluidez. Siempre que surge la vida, la consciencia se manifiesta. Somos esa consciencia.
La diminuta hormiga es consciente de los límites de su existencia. Si se ve amenazada se aleja. Interactúa con otras criaturas y tiene una especie de plan en su vida. Puede que no tenga un intelecto altamente desarrollado o una gran auto-consciencia, pero la consciencia fluye a través de ella tanto como fluye a través de nosotros. Lo único que es diferente es el recipiente a través del cual fluye y el potencial de auto-conciencia. El agua no se ve afectada por la diferencia en la forma y cualidad de los recipientes que la contienen ― ya se trate de una taza o una hoja. Todavía sigue siendo agua, al igual que la consciencia permanece como consciencia.
Así que, ¿quién soy yo? Todo lo que puedo hacer es Ser Lo Que Soy ― de ser lo que soy en la sensación de ello, en el vacío silencioso de mi verdadera naturaleza. Nunca puedo decir lo que soy. Y en el momento que digo "yo soy esto" o "yo soy eso", lo he perdido.
"Yo Soy Eso" es también una gran frase del Advaita, pero al igual que con la pregunta "¿Quién soy yo?", sólo puede decirse verdaderamente en la conciencia silenciosa. El verdadero significado no está en el concepto, sino en la sensación, en la visión, detrás de él. Del mismo modo, la verdad nunca está en las palabras del libro, sino siempre en el espacio entre las palabras y las líneas de la página.
La realidad de lo que es una mesa no está en las palabras, en la definición, en el concepto mesa, sino en la conciencia no-conceptual de la misma. Y la conciencia no-conceptual excluye la existencia de un observador separado de la mesa. Entonces, ¿qué ve, qué es eso que observa la mesa, o cualquier cosa? Una vez más, no hay una respuesta. Sólo podemos comprender realmente desde vacío, desde la ausencia ― desde el vacío silencioso de nuestro verdadero ser.
Conclusión
La conclusión es que no hay ninguna conclusión. Tal vez, más que nada, tenemos que encontrar una manera en la que podamos comprender lo que es la vida, y luego poner en acción ese conocimiento en nuestras vidas.
Esto no se puede hacer sólo a través de la mente. Viviendo desde el vacío silencioso de nuestra verdadera naturaleza es el camino. También es un revoltijo de palabras. Si nos vemos atrapados en las palabras, nos perdemos por completo. Vivir desde el vacío silencioso de nuestra verdadera naturaleza es llevar la meditación a todas y cada una de las situaciones de nuestra vida. Esto no tiene que tener connotaciones religiosas. Se trata de estar plenamente vivo para el momento presente, la realidad viviente en la que exploramos la misma textura del Ser ― desde una perspectiva impersonal.
Si nos tomamos la vida en serio, si estamos realmente interesados en aprender más sobre este viaje en el que estamos, vamos a tratar de asegurarnos que podemos vivir de acuerdo a cualquier comprensión que hemos vislumbrado. Sólo ir a la deriva por la vida, sin resolver los problemas psicológicos o emocionales que tenemos, es verdaderamente una pérdida de nuestro enorme potencial. No importa dónde estemos en nuestra historia de vida, si somos capaces de leer este libro, también somos capaces de liberarnos del sufrimiento profundizando en las áreas ocultas de nuestra mente. Quizás más que en cualquier momento de la historia de la humanidad, ahora hay una gran cantidad de información disponible gratuitamente para cualquiera que desee encontrar mayor sabiduría, satisfacción y consejos prácticos sobre cómo superar las limitaciones y sufrimientos que hemos creado.
Buen Viaje