Sección Maestros y Autores

Pamela Wilson enseña en la tradición de Ramana Maharshi. Pamela habla la Verdad del advaita, la no-dualidad ― que el universo es un todo indivisible. Enseñó el método Sedona durante seis años y luego descubrió el Advaita con Robert Adams. Tuvo su reconocimiento con Neelam en 1997 y comenzó a ofrecer satsang poco después.

Pamela nació en San Francisco en 1954. Después de trabajar como asesora durante 15 años, se dedicó al servicio y la búsqueda de la paz. Meditando durante años y experimentando cada seminario que encontraba en occidente la llevó a la conclusión de que la persona nunca puede Reposar o conocer la Felicidad pura. La persona es, en realidad, el obstáculo, no los deseos, apegos o aversiones. En 1994, conoció a Robert Adams, un devoto auto-realizado de Sri Ramana Maharshi. Los satsangs con Robert y con Neelam, una devota de Sri H.W.L. Poonja, cortaron las ataduras de la identificación y sólo la Paz permaneció. Pamela ofrece Satsang para celebrar el reencuentro de la Conciencia y el Descanso Profundo que permanece detrás de Eso. Además de su pasión por lo Desconocido, ella es una amante de la vida silvestre y el gran misterio de la cocina.

Durante los últimos quince años, ha viajado extensamente por Estados Unidos, Canadá y Europa, celebrando satsang y dando sesiones privadas. Ha llevado a cabo retiros de una semana en México, Costa Rica, Francia, Reino Unido, Canadá y EE.UU. Se ha ganado el cariño de muchos a través de su alegre sentido del humor y compasión y profunda comprensión de lo que es un ser humano.

Actualmente vive en Santa Fe con su perro Honey cuando no está de viaje ofreciendo satsang en Europa, América Central, Canadá y los EE.UU.

"Cada pensamiento,
cada sentimiento, es un visitante.
Simplemente di: Bienvenido.
Entra y siéntate conmigo".

- Pamela

"Satsang es la invitación a Reposar y dejar que la Gracia
disuelva lo que no es real. ¡Se necesita más esfuerzo para
mantener a la persona que Reposar en lo que Es!"

Satsang: Sobre Ser una Montaña

El satsang es profundo reposo. Sólo podemos estar satisfechos por lo que somos, no por lo que podemos lograr o alcanzar. Reposando antes de conocer, todos los conceptos se revelan como la danza del vacío, incluso el concepto llamado iluminación. Cuando nos reunimos en Silencio, honramos a nuestro Ser, la Fuente. Esto es devoción sin devoto, el Silencio reunido consigo mismo, como el agua bebiendo agua.

Luego indagamos en el misterio de la encarnación, ¿cómo lo informe y la forma disfrutan del amor y de la vida? Este romance divino de lo ordinario y extraordinario crea un mundo de armonía y una cacofonía de la emoción del contraste. Deja que el satsang descubra esta antigua sabiduría en tu interior, de modo que seas libre de la oposición, de la limitación y de la contención. No se requiere ningún tiempo para reposar como esto, ya que tu naturaleza es atemporal. Paremos el tiempo juntos y veamos lo que es verdadero.