Libros - Paramahansa Yogananda
Autobiografía de un Yogui
En este clásico de la literatura espiritual, Parama-hansa Yogananda hace un inspirador relato de su vida, que incluye sus encuentros con numerosos santos y sabios, sus 10 años de entrenamiento espiritual con un maestro que realizó su unión con Dios, y los más de 30 años que vivió en Estados Unidos difundiendo las liberadoras enseñanzas de Kriya Yoga. Esta obra, que es una profunda exposición de la ciencia y la filosofía Yoga, revela la unidad básica existente entre las grandes religiones de Oriente y Occidente. Se incluye en ella una gran cantidad de material que Paramahansaji agregó después de la primera edición aparecida en 1946.
Nacido en la India el 5 de enero de 1893, Paramahansa Yogananda dedicó su vida a ayudar a personas de todas las razas y credos a tomar plena conciencia de la hermosura, la nobleza y la verdadera divinidad del alma humana, y a manifestar estas cualidades de manera más perfecta en sus vidas. Después de graduarse en la Universidad de Calcuta en 1915, Sri Yogananda hizo sus votos como monje de la venerable Orden de los Swamis de la India. Dos años más tarde inició la obra, a la que consagraría su vida entera, con la fundación de una escuela para niños cuyo programa educativo ―basado en sus principios sobre «el arte de vivir»― integraba los temas académicos tradicionales con la disciplina del yoga y la enseñanza de principios espirituales. Desde entonces, el número de escuelas ha aumentado y existen al presente veintiún establecimientos educacionales diseminados a través de la India. En 1920 fue invitado, como representante de la India, a un Congreso Internacional de religiosos de ideas liberales celebrado en Boston, Estados Unidos. Su conferencia en el Congreso, y las que ofreciera posteriormente en la costa oriental de este país, recibieron una entusiasta acogida; en 1924 emprendió una gira por Estados Unidos, dando conferencias en las numerosas ciudades que visitó. / más info
Detalles del libro:
- Título: AUTOBIOGRAFÍA DE UN YOGUI
- Título Original: Autobiography of a Yogi
- Autor: Paramahansa Yogananda
- Editorial: Self-Realization Fellowship
- Año de edición: Junio 2008
Prefacio por W. Y. Evans-Wentz
El valor de la Autobiografía de Yogananda se acrecienta notablemente por el hecho de que es uno de los pocos libros en inglés acerca de los sabios de la India que ha sido escrito no por un periodista o por algún extranjero, sino por alguien de su misma raza y formación: en resumen, es un libro sobre los yoguis, escrito por un yogui. Tratándose del relato de un testigo ocular sobre las extraordinarias y poderosas vidas de los modernos santos hindúes, este libro tiene una importancia tanto oportuna como intemporal. A su ilustre autor, a quien he tenido el placer de conocer tanto en la India como en Estados Unidos, deseo que todo lector le rinda el aprecio y la gratitud debidos. Este extraordinario documento de su vida es ciertamente uno de los más reveladores de la profundidad de la mente y el corazón hindúes, y de la riqueza espiritual de la India, tal como nunca se ha publicado en Occidente.
He tenido el privilegio de conocer a uno de los sabios cuya historia aquí se revela: a Sri Yukteswar Giri. Un retrato del venerable santo aparece como parte del frontispicio de mi obra Yoga tibetano y doctrinas secretas. Fue en Puri, ciudad de Orissa, en el Golfo de Bengala, donde encontré a Sri Yukteswar. Encabezaba entonces un tranquilo ashram cerca del mar y se dedicaba principalmente al entrenamiento espiritual de un grupo de discípulos jóvenes. Expresó verdadero interés por el bienestar del pueblo de Estados Unidos y de todas las Américas, y también de Inglaterra, y me hizo preguntas referentes a las lejanas actividades, particularmente en California, de su discípulo predilecto Paramahansa Yogananda, al que quería mucho y a quien había enviado en 1920 como su emisario a Occidente.
Sri Yukteswar era de voz gentil, semblante noble y presencia agradable, y bien merecía la veneración que le expresaban espontáneamente todos aquellos que le seguían. Toda la gente que le conocía, aun no perteneciendo a su comunidad, sentía por el una altísima estimación. Vivamente recuerdo su figura alta, erguida, ascética, ataviada con las ropas color azafrán de quien ha renunciado a las aspiraciones mundanas, de pie a la entrada de la ermita para darme la bienvenida. Su cabello era largo y algo rizado y su faz barbada. Su cuerpo era musculoso y firme, pero delgado y bien proporcionado; su paso, enérgico. Había elegido como su hogar terrestre la santa ciudad de Puri, donde van en peregrinación multitudes de devotos hindúes, representantes de todas las provincias de la India, para visitar el famoso templo de Jagannath, el «Señor del Mundo». Fue en Puri donde Sri Yukteswar cerró sus ojos mortales en 1936 a las escenas de este estado transitorio del ser, y falleció sabiendo que su encarnación había sido llevada a un término triunfal.
Me alegra, en verdad, el poder dar este testimonio del carácter noble y de la santidad de Sri Yukteswar. Satisfecho de permanecer lejos de la multitud, se entregó sin reservas y con tranquilidad a esa vida ideal que Paramahansa Yogananda, su discípulo, ha descrito ahora para las edades venideras.