Artículos - Robert Adams
La Felicidad Suprema
Una Conversación Con Robert AdamsRobert Adams pasó tres años con el sabio contemporáneo Ramana Maharshi, desde 1947 hasta la muerte de éste en abril de 1950. Robert ha estado llevando a cabo reuniones en el área de Los Angeles durante nueve años.
Robert Adams: Hay una cosa que puedo decirle con seguridad. Todo está bien. Todo se desarrolla como debe ser. Le puedo decir que realmente no hay nada malo en ningún lugar. Si usted piensa que tiene un problema, ese es el error - pensar que tiene un problema. Tan pronto como deja de pensar, todo irá bien.
Interlocutor: ¿Todo no va bien mientras pensamos?
R: Sí, pero usted no lo sabe. Algunos de nosotros no pensamos en ello, diciendo: "Tengo un problema", o "Estoy implicado en algo que no puedo controlar, que es más grande que yo", o "Algo me duele", o "Siento ira". ¡Pero le puedo asegurar, no hay nada malo! Todo lo que tiene que hacer es observarse a sí mismo. Tan pronto como su mente empieza a pensar más allá de su nariz, agárrelos - no su nariz, sino sus pensamientos. Usted puede agarrar también su nariz si quiere (risa). Agarre sus pensamientos con la mente, y termine con ellos de cualquier manera posible, ya sea mediante la observación de los pensamientos o mediante la práctica de la auto-indagación y preguntando a quien les acontece. Cualquier cosa que necesite hacer, no se permita pensar. Si su mente no piensa, usted será sumamente feliz. Usted tendrá una felicidad pura.
Algunas personas me preguntan: "Robert, ¿por qué no habla simplemente de la verdad más elevada todo el tiempo?" Algunos otros me dicen que hablando de tal manera no pueden entender lo que estoy diciendo (risa). Así que ese es el dilema. Hago lo que tengo que hacer. No hago planes. Todo es improvisado. No tengo ensayos.
Un hombre me llamó ayer diciéndome que había estado practicando durante dos semanas, recibió un seminario y pagó 700 dólares, y todavía no se había realizado. Recibo llamadas como esta todo el tiempo. Lo que usted dice determina la respuesta que le doy. Pero hay una respuesta estándar. Piense en la pregunta: "¿Cuándo (yo) me convertiré en auto-realizado?" Antes de contestar a esta pregunta, suelo preguntar: "Por favor, dígame qué quiere usted decir con 'yo'?" Luego también pregunto, "¿Qué quiere decir con 'Auto-realización'?" Por lo general, se callan, así que finalmente pregunto: "¿Quién cree usted que es el 'yo'? ¿Quién quiere convertirse en Auto-realizado?"
Si usted no puede hacer nada más, ríndase a la consciencia. Por rendición, me refiero a rendir o entregar su ego, sus problemas, sus emociones, sus miedos, sus frustraciones y su ira. Renuncie a todo. Diga: "¡Tómalo, consciencia!"
No se deje llevar por sus emociones. Deténgase en el centro y observe. Observe sus emociones dominándole. Observe sus temores controlándole. Observe su ira surgiendo. No trate de detenerla, simplemente mire y observe. Mire inteligentemente y dese cuenta de quién es el que se está enfadando. No es usted. Ni siquiera es su ego, porque no hay ego. No es su cuerpo, porque no hay cuerpo. No es su mente, porque no hay mente. Por lo tanto, ¿qué es lo que está produciendo su enfado? Nada.
Estaba hablando de todas las llamadas telefónicas que he estado recibiendo. La gente todavía pregunta lo que pienso acerca de este o aquel maestro, esta o aquella persona, o por qué no habrían de ir a ver a otros maestros también. Realmente no sé qué decir. Ustedes tienen que hacer lo que tienen que hacer. Les puedo decir que cuantas más personas consulten, más confusos se volverán. No me importa si no vuelven nunca por aquí otra vez porque no estoy buscando nada.
Si usted encuentra a un maestro que le parece tener una afinidad con él, debería quedarse por un tiempo. Si corre de un maestro a otro, se volverá totalmente confuso o desorientado. Cada maestro tiene su sitio. Usted se sentirá atraído por la persona con quien tiene que estar tanto tiempo como sea necesario. Depende en donde está su consciencia.
I: Robert, en toda la literatura espiritual se hacen distinciones entre un camino gradual y la iluminación instantánea. Todo esto acerca de pasar por etapas - no puede relacionarlo. Simplemente no tiene ningún sentido para mí.
R: ¿Qué es lo que no puede relacionar?
I: Me refiero a la idea de pasar de una etapa a la siguiente etapa.
R: Esto es para la persona que trata de esforzarse. La verdad es que no hay nada que pasar. Parece que algunas personas, que necesitan comprender estas cosas y las investigan por sí mismas, serán ayudadas a ver de dónde vienen. Tal vez usted no lo necesita.
I: El estado de felicidad del que habla yo no lo llamaría felicidad. El estado parece muy por encima de la felicidad. La felicidad como lo opuesto a la tristeza.
R: Tiene razón.
I: La tristeza incluso podría entrar en ese estado que eres Yo y sería simplemente algo que estaba pasando sin identificación.
R: Tiene razón. A modo de ejemplo, puedo llorar en un funeral, pero me doy cuenta quien está llorando. Puedo tener tristeza si quiero pero nunca estoy realmente triste.
I: El estado de mente no-apegada, sería realmente lo más cercano a eso, ¿no es así?
R: Es cierto. Estoy buscando las palabras para describir las cosas. Más importante aún, siempre hay felicidad total. No se trata de felicidad humana. Para la mayoría de la gente para ser feliz, tiene que haber una persona, un lugar o cosa implicada en su felicidad. En la verdadera felicidad, no hay cosas involucradas. Es un estado natural. Usted permanecerá en ese estado para siempre.
I: Desde el punto de vista de la práctica, me he dado cuenta de que no importa qué estado surja, el problema es si estoy dispuesto a soltarlo. ¿Es importante para mí estar en mi estado emocional? La respuesta es que de todos modos no hay nada que se pueda hacer, ya que viene y va.
R: Actúe como si hubiera algo que pueda hacer, a pesar de que no hay nada que pueda hacer. Si usted ve pasar por la sala a un hombre hambriento, no piense que no hay nada que pueda hacer. Dele un pedazo de pan.
I: Pero en ese estado de la mente que surge, las emociones surgen, las percepciones surgen, no hay nada que puedas hacer.
R: Excepto observar. Sólo observa. Sólo observa. Otra cosa a tener en cuenta es la siguiente: si usted estuviera aquí en calidad de visitante, teniendo solamente una reunión conmigo, y nunca me volviera a ver, y le expusiera la verdad más elevada y me marchara; usted diría que eso es estupendo. Pero cuando le veo dos o más veces por semana, empiezo a conocerle muy bien, y todo lo que digo es para ayudarle a crecer porque eso es lo que se necesita en ese momento, ya que voy a estar con usted de nuevo. A las personas que estaban con Ramana Maharshi como devotos, él no les explicaba la verdad absoluta todo el tiempo. Él les hablaba como una persona común y corriente. Les preguntaba por su bienestar, su salud, sus problemas, y les daba consejos prácticos. Él no diría: "Nada importa, porque nada existe". Ellos tenían problemas. Así que les hablaba de forma práctica.
I: Si no vemos progreso dentro de nosotros mismos y vemos que estamos continuamente enfadándonos, no deberíamos dejar que eso nos moleste.
R: Siga observando, siga mirando, siga centrado en el Sí mismo (1), y no habrá nadie para preguntar quién está molesto o quién no está molesto. Usted sólo hace esa pregunta cuando su atención está más en el molestar que en el Sí mismo. Si usted cambia su atención hacia el Sí mismo, vea qué ocurre.
I: La cuestión es, ¿es eso gradual?
R: Para algunas personas. Depende de cuánto tiempo le dedicas a ello.
I: No podemos simplemente desconectar nuestras emociones. Cuando voy a trabajar a veces, encuentro tal intensidad allí, con gente regañándose unos a otros, me quedo atrapado en ello. Por supuesto que me doy cuenta, por lo general después de lo ocurrido, y me pregunto, "¿Desaparecerá esto gradualmente permaneciendo en mí mismo, o voy a despertar algún día de repente?"
R: Por la mañana, cuando abres por primera vez los ojos, ese es el momento de trabajar en uno mismo. Pregúntate a ti mismo: "¿Quién soy yo? ¿Cómo he llegado aquí? "Reconcíliate contigo mismo. Si haces esto lo primero al despertarte, el día entero será bueno, sin estos problemas. Simplemente no vaya directamente a trabajar. Levántese una hora antes si es necesario. Véase a sí mismo por lo que es, y dese cuenta de la verdad. Céntrese en el Sí mismo. Pregúntate a ti mismo: "¿Quién soy yo?" y espera. Concéntrese en la fuente del "Yo Soy", o dígase a sí mismo: "Yo Soy, Yo Soy", y luego vaya a trabajar. Entonces podrá ver los cambios. Usted construirá un poder que llevará con usted durante todo el día.
I: Seguir a ese "Yo" hasta su fuente, encontrar el "Yo" mediante la auto-indagación y permanecer con él parece dar a entender la no existencia, apatridia.
R: No se preocupe por no existir. Simplemente observe el "Yo", y vea que va hacia el corazón.
I: ¿No es tanto un seguimiento, sino que sucede por sí mismo?
R: Sucede por sí mismo.
I: Cuando contemplo el "Yo Soy", ¿quiere decir que yo ya soy el Sí mismo?
R: Así es.
I: Robert, es porque tenemos el concepto de que no somos el Sí mismo que hemos pasado por alto el hecho de que hemos permanecido en el Sí mismo todo el tiempo. Como Ramesh Balsekar ha dicho, sólo tenemos la duda de que no somos el Sí mismo, pero la verdad es que siempre lo hemos sido.
R: Exactamente. Cuando no vemos esto, pasamos por todos estos problemas y jugamos a todos estos juegos, hasta que nos damos cuenta de que somos el Sí mismo. Luego esto es ello.
I: Si no tenemos el Sí mismo y estamos diciendo: "Yo soy ello", ¿cómo evitamos que lleguemos a repetirlo como un loro?
R: No se convierte en una repetición como un loro si lo hace con la respiración. Cuando inhale, diga "Yo". Cuando exhale, diga "Soy". Un cambio sutil de energía se produce en el Sí mismo, y usted será más pacífico, estará más tranquilo, y muy pronto perderá toda identificación con su cuerpo y mente. Usted permanecerá como "Yo Soy".
I: Robert, cuando hacemos la auto-indagación, en realidad es el primer paso para encontrar el "Yo". Cuando desarrollamos un sentido de permanecer en el "Yo", no hay mucha necesidad de indagación porque vamos directamente a la permanencia.
R: La auto-indagación no tiene un comienzo. Si practicas "Quién Soy Yo", parece simple, pero es muy poderoso. Sólo diga: "¿Quién Soy Yo?" a continuación haga una pausa, y después diga de nuevo: "¿Quién Soy Yo?" Nunca responda a la pregunta. Sólo siga repitiendo: "¿Quién Soy Yo?" Con el tiempo, algo sucederá.
I: Yo me pregunto, si se desarrolla un sentido de auto-permanencia (permanecer en el Ser), se puede ver que los estados vienen y van, observar la identificación con el ego, y entonces la auto-indagación no es necesaria si puedes ir directamente a eso.
R: Si usted permanece en el Sí mismo, no hay ego que observar ― sólo hay el Sí mismo. Usted observa el ego con la mente, no con el Sí mismo. Si permanece en el Sí mismo, no hay nada más. Ha concluido. Está terminado. Todo lo demás es de la mente. Cuando digo permanecer en el Sí mismo, quiero decir olvidar todo y ser uno mismo. No hay nada más que saber en ese punto.