Artículos - Nisargadatta Maharaj
Las bases de la enseñanza
Conversaciones con Sri Nisargadatta Maharaj
Maharaj: La naturaleza de la consciencia tiene que ser comprendida. Esta consciencia sólo puede surgir en el cuerpo físico, y el cuerpo físico es la esencia de los cinco elementos (1). Debido a la asociación con el cuerpo físico surge el sufrimiento. La mayoría de la gente que viene aquí no podrá aceptar este tipo de conocimiento, porque está en un nivel estrictamente básico. Pero algunas personas, que se aplican y que pueden aceptar tal punto de vista, ciertamente comprenderán. Ellos estarán totalmente libres del impacto del dolor y de la infelicidad, si comprenden que esto último sólo puede resultar de la consciencia que se ha identificado con el cuerpo físico y sufre como un individuo. En ese caso, el sufrimiento debe resultar inevitable.
Pero, ¿qué es el individuo? Hay un cuerpo creado de los cinco elementos, y en ese cuerpo mora el soplo vital (prana) y la consciencia; es una unidad compuesta. Todas las formas vivas contienen el soplo vital y la consciencia. Y, aunque las formas son diferentes, todas ellas contienen los mismos elementos. Así pues, pregunto de nuevo: ¿Cuándo surge el individuo? En esencia, no hay ninguno. Y ésta es mi enseñanza básica que hay que comprender; pero sólo muy pocos comprenderán.
Visitante: ¿Podría usted repetir esto? Había tanto alboroto que no he podido seguirle.
M: Ciertamente, pero no con las mismas palabras. ¿Qué es lo que nos interesa? Estamos tratando de la forma física constituida por los cinco elementos y que se alimenta de esos cinco elementos. En esa forma están operando la fuerza vital (el soplo vital) y esta consciencia ―es decir, el conocimiento "yo soy" o la "sensación de ser", la sensación de existir. Esto último es la "senciencia", el regalo de la consciencia. Esto es todo lo que podemos percibir: el cuerpo, el soplo vital y la consciencia. Todas las formas están hechas de los mismos componentes. Así pues, ¿dónde aparece el individuo? Siempre es igual: el individuo como tal, jamás ha existido. Y por esta razón no hay ninguna necesidad de identificarse uno mismo con nada. Sin embargo así sucede: la consciencia se identifica con el cuerpo y, de esta manera, surge el "individuo". Mientras esto sea así, ese individuo no puede dejar de sufrir. Y lo que yo soy... yo no soy ni el cuerpo ―que es sólo los cinco elementos― ni la fuerza vital [el soplo], ni la consciencia que posee el cuerpo.
Yo debo identificarme con la consciencia mientras el cuerpo esté aquí, porque forma una unidad con él. Pero en realidad, no soy ninguna de estas tres cosas. Mientras existe el cuerpo, yo soy la consciencia que meramente presencia todo lo que está pasando. Cuando el cuerpo muere, la fuerza vital desaparece y se mezcla con el aire y la consciencia se mezcla con la Consciencia Universal. Yo no soy nada esencialmente (identificable) en esta consciencia, puesto que sólo soy su testigo. Y lo que yo soy en el sentido absoluto, no es posible expresarlo en palabras. En esa Presenciación última, nadie tiene ninguna consciencia de estar presente. La presencia misma no es en lo Absoluto.
Nadie que no esté interesado en el tema querría venir aquí. Así pues, se puede asumir que los que vienen aquí están vitalmente interesados en el tema y que han hecho su trabajo... de modo que todos los que vienen aquí, son jnanis. Pero, ¿cuántos de entre nosotros conocemos la naturaleza y la base de esta consciencia "yo soy", que sólo existe mientras el cuerpo está ahí? Cada uno de nosotros debe decir "yo soy" y realizarlo. No hay ningún "tú" y no hay ningún "yo" como entidades individuales.
Cuando hay un desequilibrio en la sustancia corporal, sobreviene la enfermedad. Pero cuando esa materia está en perfecto equilibrio, no hay ninguna enfermedad. ¿Cómo es eso?
La pregunta era: ¿Depende la Consciencia Universal de los cinco elementos para su existencia? La respuesta a esta pregunta es que la Consciencia Universal y la manifestación al completo aparecen simultáneamente. La manifestación acontece porque la consciencia está aquí. Hasta que el pensamiento "yo soy" no estuvo aquí, no hubo ninguna manifestación; ambos sobrevinieron simultáneamente. Pero debido a que nos identificamos con el cuerpo en el que se manifiesta la consciencia individual ―y para manifestarse, la consciencia tiene que asumir una forma― nace el "individuo" y ese individuo sufre.
Antes he explicado la cuestión de la Consciencia Universal. La Consciencia Universal es algo como un nombre dado a una ciudad. Así pues, por ejemplo, consideremos Bombay. ¿Qué entiende usted por "Bombay"? ¿Puede usted producir "Bombay"? ¡No! La palabra designa la totalidad de algo determinado... la Consciencia Universal es meramente un nombre que se da a Eso-que-es-sin-forma.
Yo uso la palabra "ciudad", y no especialmente Bombay. Quiero decir cualquier ciudad o lugar. Si digo Bombay, significa que me refiero a un área limitada.
V: Esto es muy importante. A mi entender, una ciudad o una nación, comprende sólo los individuos que la componen.
M: Los individuos pueden haberle dado un nombre, pero eso que se ha creado, ¿lo ha creado el hombre? El hombre nace de los cinco elementos. Pero ¿ha creado el hombre los cinco elementos? Los cinco elementos han surgido de esa consciencia, que está en el cuerpo individual.
V: La Consciencia Universal y esta consciencia dentro de mí, ¿son lo mismo?
M: La luz que se percibe a través de los ojos y la luz que se ve generalmente reflejada en las diversas manifestaciones, ¿son diferentes?
Repito: Todo el problema reside en la identificación con el cuerpo individual y consecuentemente con el individuo. Por consiguiente, el individuo está siempre temeroso de la muerte, de la muerte del individuo.
¿Hay alguna pregunya sobre este tema?
Usted es esta consciencia. Y de esta consciencia nace el universo entero. Nosotros nos consideramos individuos; hemos limitado lo ilimitado, a una cosa insignificante. Lo infinito se ha reducido así a un simple cuerpo. Ése es todo nuestro problema.
Tenemos también esta pregunta: si es la misma Consciencia Universal la que aparece en millones de seres humanos, ¿por qué actúan de maneras tan contrarias, creando todo tipo de caos ? Si una mujer tiene diez hijos, todos han nacido de los mismos padres, pero ¿no actúan ellos de maneras sorprendentemente contrarias? ¿Por qué ocurre así? Porque, aunque constituidos de los mismos cinco elementos básicos, la composición de cada individuo, que resulta de las diferentes proporciones ―permutaciones y combinaciones― de estos elementos, es completamente diferente. Así, cada persona actúa de una manera diferente. O, para usar una analogía distinta, el metal puede ser el mismo, pero los propósitos para los que ese metal ha sido convertido en diferentes instrumentos son muy diferentes; cada instrumento puede usarse para un fin particular. Así pues, los ingredientes son los cinco elementos, pero el objeto final ―creado a partir de las diferentes combinaciones de estos ingredientes― está sujeto a actuar únicamente según su composición.
V: Maharaj, ¿con el propósito de qué?
M: El propósito es la suma de todos estos millones de combinaciones. Hasta donde yo sé... por eso decía antes que hemos de conocer primero la naturaleza y la base de este compuesto al que identificamos como nosotros mismos ... A no ser que, en primer lugar, conozca a fondo su naturaleza, ¿cómo puedo conocer el fin y la base de todo el universo?
Interprete: Maharaj le está preguntando ¿ha realizado usted la naturaleza de la consciencia?
Él utiliza un ejemplo ―como es su costumbre― familiar y conocido. En este país se cocina un tipo de pan sin levadura. Encienden un fuego, ponen una sartén en él y entonces se vierte la masa en ella. Finalmente, el pan se hace y se retira. Cuando se echa a la sartén la masa siguiente, una vez que está formada, generalmente se parecerá a la anterior, pero el numero de irregularidades en las dos no será exactamente el mismo. Usted puede tener docenas de estos chapatis, pero cada uno de ellos será diferente. Ésa es la naturaleza de la creación misma: ser variada. Así pues, Maharaj dice que comprenda la naturaleza y la base de eso-que-es-creado como la manifestación; y eso es la consciencia. A no ser que comprenda esa consciencia, no existe ningún otro modo de realizar el Paramatman. El Paramatman no puede alcanzarse sino por la comprensión.
M: El misterio del poder hipnótico de maya es que uno se identifica con el cuerpo. Y el mecanismo de este tipo de identificación no difiere en modo alguno del identificar un trozo de piedra ―o de algo creado de la piedra― con Dios y adorarlo con devoción. En la medida en que eso funciona, está bien, y este tipo de adoración tendrá sus efectos normales en la consciencia. Pero a no ser que se comprenda la naturaleza de la consciencia, uno no podrá comprender su verdadera identidad. Así pues, una vez comprenda la naturaleza de la consciencia, comprenderá también que usted no es la consciencia. Nada que haya visto y comprendido, puede ser usted; usted, como sujeto, sólo puede comprender algo que sea un objeto; y está obligado a aceptarlo así.
Si discute conmigo, basándose en la literatura tradicional y en el conocimiento tradicional... habrá muchos sabios eruditos que me comerán vivo. Y sin embargo, por lo que se refiere al conocimiento básico, que es del que yo trato, ¿por qué se quedan mudos? Porque es algo totalmente diferente de cualquier cosa que pueda comprenderse. Todo lo que se comprende, todo lo que se ve, no es verdadero.