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Enrique Ribeaux Roig

10 saltos al vacío

Por Enrique Ribeaux Roig 2 de agosto de 2017
Salto

1. Si existe lo Absoluto, entonces yo soy lo Absoluto, porque si no lo fuera, lo Absoluto no sería absoluto y, por ende, no existiera. O yo soy lo Absoluto, o lo Absoluto no existe.

2. Lo Absoluto no tiene principio ni final, porque no hay nada anterior a él en donde su principio acontezca, ni después de él en donde su final tome lugar.

3. Todas las manifestaciones de lo Absoluto nacen y mueren, surgen y desaparecen. Son como las olas en el mar. La mente tiende a cosificar y ponerle nombre a estas manifestaciones, olvidando que en realidad se trata del mismo Absoluto asumiendo varias formas. Así es como surgen "las cosas", como creaciones mentales carentes de existencia propia.

4. Las olas por sí solas no existen, no tienen una existencia propia separada del mar. Le hemos puesto un nombre a las manifestaciones del mar, le hemos llamado "olas", y hemos olvidado que se trata simplemente de eso, de un nombre. Lo que existe es el mar y sus manifestaciones; no hay mar y olas, solo mar. Así ocurre con las cosas, le hemos puesto nombre a cada una de ellas olvidando que son solo manifestaciones de lo que realmente existe, que es lo Absoluto.

5. El nacimiento y la muerte son una ilusión, porque la "cosa" que nace y muere también es una ilusión. ¿Nacen y mueren las olas? ¿Existen las olas?

6. La separación entre una causa y su efecto es ilusoria. Si realmente estuvieran separados, ¿cómo definir con exactitud dónde termina la causa y comienza el efecto?

7. Toda causa es el efecto de una causa anterior. Encontrar la Causa Primera es, pues, imposible, lo cual de por sí pone ya en duda su existencia. La relación causa-efecto es una ilusión que toma lugar cuando se perciben las cosas como entidades separadas. Si las "cosas" (vistas como entidades separadas) son una ilusión, entonces la causación también lo es. Por ende, no existe un Origen, no existe un Génesis, y por tanto, tampoco habrá un Final.

8. Lo que nace, antes no existía ¿Cómo puede comenzar a existir algo que antes no existía? ¿Cómo puede surgir algo de la nada? Lo que pasa es que no se trata de ese "algo". El nacimiento y la muerte del "algo" son sobre-imposiciones a la realidad. Es como la muerte de una oruga y el nacimiento de una mariposa en su lugar, ambas son ilusiones; ni hubo muerte de una cosa, ni nacimiento de otra, son más bien manifestaciones de una misma entidad.

9. El tiempo es la distancia que hay entre el estado 1 y el estado 2 de una cosa. Como la cosa no existe en realidad, el tiempo asociado a sus cambios de estado tampoco existe. El espacio es la distancia entre dos cosas, por ende, el espacio tampoco existe porque no hay distancia entre dos cosas que no existen.

10. Para que exista un antes, un durante y un después, tiene que haber una "cosa" que exista antes, una "cosa" que exista durante, y otra "cosa" que exista después. Para que exista un allí, un aquí y un allá, tiene que haber una "cosa" que exista allí, una "cosa" que exista aquí, y otra "cosa" que exista allá. Para que exista una causa y un efecto, tiene que haber una "cosa" que exista como causa y otra "cosa" que exista como efecto. La existencia del tiempo, el espacio y la causación, es pues dependiente de la existencia de "cosas". Como la existencia de las "cosas" es ilusoria, entonces la existencia de tiempo, espacio y causación, también es ilusoria. Lo que depende de cosas ilusorias para existir, también es ilusorio.

© Enrique Ribeaux Roig