Artículos - Krishnamurti

El Vedanta es una escuela de filosofía de la India con orígenes muy antiguos. Tiene sus raíces en las enseñanzas de escrituras muy influyentes, en particular los Upanishads, que forman la última parte de la literatura védica. Un aspecto importante de esta filosofía es cuestionar la relación entre el yo o ser real (llamado Atman) y la Realidad Absoluta (llamada Brahman ). ¿Quiénes somos realmente? ¿Cuál es la naturaleza de este mundo? ¿Y cuál es nuestra relación con esta misteriosa existencia? El Vedanta Advaita es una corriente dentro de la filosofía Vedanta que interpreta esa relación como no-dual (advaita). En otras palabras, el Vedanta Advaita proclama que una investigación profunda en nuestra propia naturaleza, más allá de las identificaciones superficiales que normalmente hacemos con nuestras culturas, naciones, razas, etcétera, revela que Atman y Brahman son uno y lo mismo.

Han habido muchos renombrados filósofos del Vedanta Advaita desde la época de los Upanishads, siendo el más famoso el sabio hindú del siglo VIII-IX, Shankara. En el siglo pasado, varios maestros promulgaron enseñanzas no-duales, que en ocasiones han sido etiquetadas como Neo-Advaita, porque las filosofías no se derivan de las interpretaciones de los textos clásicos del Vedanta, y no insisten en sus métodos. En cambio, los maestros apuntan hacia un tipo de realización experiencial de la verdad del no-dualismo. Entre estos maestros están Nisargadatta Maharaj y Ramana Maharshi.

Krishnamurti no quería que sus enseñanzas fueran comparadas con otros maestros y sus enseñanzas. Creo que esto se debe a que él no quería que sus enseñanzas se convirtieran en objeto exclusivamente de algún tipo de examen académico. Creo que K quería que sus oyentes captaran la esencia de lo que estaba diciendo, cuando le escuchaban o cuando leían sus palabras, y en ese instante tener una comprensión profunda de la verdad a la que él señalaba. Ponerse a pensar sobre sus enseñanzas, y compararlas con otras enseñanzas, si bien es de provecho para los académicos como yo, y de interés para curiosos intelectuales de todo el mundo, no es necesariamente beneficioso para lograr la visión psicológica transformadora que Krishnamurti nos insta a alcanzar.

Sin embargo, ciertamente uno puede encontrar patrones en las enseñanzas de Krishnamurti y demostrar cómo estos tienen su paralelo en las enseñanzas de las filosofías de la liberación. Algunos han visto similitudes entre las enseñanzas de Krishnamurti y las del Vedanta Advaita. Se necesitaría un volumen para delinear todas las similitudes. Sin embargo, muchos seguidores tradicionales del Vedanta Advaita se esfuerzan por señalar las diferencias. Creo que ambos grupos están en lo cierto, porque hay muchos aspectos donde las enseñanzas de Krishnamurti convergen con las de las filosofías no-duales y muchos aspectos en los que divergen del Vedanta Advaita tradicional. Un ejemplo simple es fijarse en la afirmación de Krishnamurti: "Tú eres el mundo", lo que sugiere que la persona aparentemente separada y aislada es en realidad una con la vasta plenitud de la realidad. Pero Krishnamurti también rechaza la tradición, y los caminos, y seguir a los maestros y a las escrituras autorizadas, todos los cuales son una parte muy importante del cuerpo de enseñanzas del Vedanta Advaita.

Una actividad más interesante, en mi opinión, es un auto-examen riguroso de lo que motiva a uno a encontrar las similitudes o a resaltar las diferencias entre estas dos enseñanzas. Ese examen podría dar lugar a una comprensión profunda de la atracción que uno siente por una de ellas o por las dos. Un bolígrafo y un rotulador tienen similitudes y diferencias. Se podía gastar mucho tiempo y energía hablando de estas similitudes y diferencias y por qué se prefiere uno en vez del otro. Pero si se quiere enviar una carta urgente, tales deliberaciones no serán significativas. Uno cogería el primero que estuviera a mano. Krishnamurti me parece estar diciéndonos que cojamos y utilicemos cualquier pizca de realidad que esté a nuestra disposición, en este momento, porque el cambio transformador es algo urgente. El conflicto se resuelve a través de la percepción profunda, ahora, no mañana, cuando hayamos verificado que los maestros o enseñanzas que seguimos son únicos, adecuadamente profundos, históricamente venerables, de acuerdo con los principios de nuestra herencia religiosa, y así sucesivamente. El conflicto puede ser alimentado por las mentes que aplican el pensamiento en satisfacer las necesidades de los mismos pensamientos que necesitan tener "razón" y estar seguros en sus preferencias intelectuales.

"Yo sostengo que la Verdad es una tierra sin caminos, y no es posible acercarse a ella por ningún sendero, por ninguna religión, por ninguna secta. Ese es mi punto de vista y me adhiero a él absoluta e incondicionalmente. La Verdad, al ser ilimitada, incondicionada, inabordable por ningún camino, no puede ser organizada; ni puede formarse organización alguna para conducir o forzar a la gente a lo largo de algún sendero en particular." - [J. Krishnamruti, 3 agosto 1929]