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Jim Newman
El sentido de la vida... anhelo de plenitud
Por Excellence Reporter 26 de enero de 2018Excellence Reporter: Jim, ¿cuál es el sentido de la vida?
Jim Newman: No hay sentido ni necesidad de un sentido de la vida. Todo es ya lo que es, lo que ya es innecesariamente, libre y realizado.
La “vida” no está separada de lo que es. Sin separación, no hay espacio ni distancia en el que pueda surgir la necesidad de un sentido de la vida.
Sólo hay lo que es. “Lo que es” no es objetivo ni subjetivo, no es conceptual, cognoscible o comprensible. “Lo que es” es indivisible, lo abarca todo, todo sin posición o perspectiva, sin interior, sin exterior, no dos, no separado, no dual.
Lo que es ―todo indiferenciado― puede aparecer como algo, una perspectiva, una posición aparente. Se puede experimentar una posición, haciendo que la apariencia parezca personal. Como experiencia personal, la vida parece ser un objeto o “algo” que requiere significado. Sin embargo, la persona es ilusoria y no tiene realidad fuera de su experiencia de sí misma. La búsqueda de sentido es una necesidad que surge de esa experiencia, que es la experiencia de la separación, la experiencia de que “lo que es” es real y personal.
La pregunta o búsqueda de un sentido a la vida parte del anhelo de plenitud, de libertad absoluta, que es sin saberlo un anhelo de disolución, un fin de la persona. La experiencia personal busca inevitablemente una respuesta a la pregunta “¿qué sentido tiene mi vida?”. Para la persona no hay respuesta porque esto, lo que es, no tiene ningún sentido. Y no hace falta que tenga un sentido. La única solución para la persona es el fin de la persona.
La persona no puede ir más allá de la naturaleza ilusoria de sí misma y no puede evitar ser un efecto de sí misma: un buscador. Su búsqueda es del amor, de más o mejores experiencias. Se experimenta a sí mismo en un camino para encontrar lo que espera que resuelva su malestar de necesidad. El camino es buscar. La búsqueda puede ser la búsqueda de dinero, poder, más... Debido a que la búsqueda no aborda ni puede abordar la causa de la necesidad, solo puede conducir a una mayor búsqueda. La premisa de la búsqueda, de que algo intrínsecamente está mal o falta, es ilusoria. En consecuencia, todos sus esfuerzos están irremediablemente limitados a esa premisa falsa.
La persona está tratando de superar este malestar de la necesidad de experiencia a través de más experiencia.
El esfuerzo ejercido por la persona nunca puede conducir a la realización que busca, la inclusividad ilimitada de lo incognoscible “lo que es”. Lo que se anhela está más allá de la búsqueda personal, siendo ya “lo que es”. “Lo que es” no es una realidad objetiva, no es cognoscible. “Lo que es” es el vacío siendo todo como es. Todo siendo lo que es, ya es completo, ya absolutamente libre, sin necesidad de sentido.
JIM NEWMAN, mientras crecía nunca fue capaz de creer las respuestas ofrecidas por la religión o la espiritualidad enlatada acerca del sentido de la vida. Se engendró una búsqueda que terminó sin encontrar respuesta a las preguntas. Terminó con el final del interrogador. La revelación: no hay necesidad de buscar lo que ya está completo. / Más información