Extractos - Emma Vázquez

“Ser y no ser, esa es la cuestión”

Por Emma Vázquez

Lo que fuiste ayer no es lo que eres. Lo que puedas llegar a ser no es lo que eres. Ayer no existe. Mañana no existe. Lo que eres es lo que eres AHORA y AQUÍ: el único tiempo y el único espacio que es REAL.

Pero nos empeñamos en pensar, en sentir, en querer ser lo que no somos porque CREEMOS que, si pensamos, sentimos y somos MEJOR (¿qué es mejor?), seremos más felices. Nos sentiremos menos solos, menos vacíos, menos tristes. Y, de esta manera, le pegamos una patada a la felicidad (¿qué es la felicidad?) y la lanzamos al futuro, al mañana que no existe y que nunca llegará. Nos creemos nuestra historia mental sobre la felicidad, sobre lo que nos hará felices, y la proyectamos allá a donde vamos. A cada paso que damos. Y no nos damos cuenta, no somos conscientes, de que no es más que una historia de la mente, que unos pensamientos que nos creemos, que unos condicionamientos que hemos recibido y seguimosy recibiendo.

Que la felicidad, sea lo que sea eso y si no es otra invención más, o es Aquí y Ahora o no es. Que cualquier cosa, pensamiento, emoción, destino, o es en cada instante o no es.

Que podemos soñar lo que queramos, fantasear, imaginar, pero nada de eso es real. Nada está sucediendo en este momento. Y muchas veces confundimos la imaginación con la realidad. Lo soñado con lo real. La fantasía con la realidad. Las palabras con la realidad. Los conceptos con la realidad. Los mapas con el territorio. “Lo que es” con el nombre, la explicación, la definición dada sobre “lo que es”.

Todo es Perfecto, desde lo soñado hasta lo no soñado. No TIENES QUE dejar de soñar, de fantasear, de imaginar, de pensar PARA ser lo que eres. Para sentirte completo, pleno, abundante. ¡YA LO ERES! Sientas lo que sientas y cómo te sientas. Incluido si te sientes vacío, carente e incompleto.

Las nubes no pueden dañar el Cielo. Lo que crees que eres no puede tocar LO que siempre Eres. El “yo” no mancha la Esencia. El televisor no manipula ni quebranta en lo más mínimo a la Electricidad.

No hay nada que alcanzar. Ningún lugar al que llegar. Ya estás donde sólo puedes estar. Ya eres lo que sólo puedes SER. Estés llorando, riendo, cabreada, rota, pletórica, enferma o extasiada.

Siempre ERES lo que “tienes que” SER. No es algo que decidas “tú” (“tú” no existe). Eres la Vida siéndose a sí misma, manifestándose a sí misma en la forma que lo hace. A veces, en forma de luz. Otras, en forma de oscuridad. En alegría o en tristeza. En calma o en caos. En guerra o en paz.

Todo Perfecto. Todo Iluminado. Todo YA “bien”.

Lo que hagas o dejes de hacer no va a depender de ti porque “ti” no existe. La Vida te moverá a hacer o a no hacer. A decir o a callar. A salir de fiesta o a quedarte en casa tumbada en el sofá. A tener pareja o a estar soltera. A ser fiel o a traicionar. A respetar o a abusar. A cuidarte o a intoxicarte. A tener salud o enfermedad. A luchar o a meditar. A sufrir o a disfrutar. A cambiar de trabajo o a quedarte donde estás. A enamorarte hasta las trancas o a no hacerlo jamás. A sentir culpa o a sentir tranquilidad.

Da igual. ¿A QUIÉN le importa? Eres lo que eres. Y no puedes intervenir en ello. La Vida podrá producir cambios en “ti”, pero será cuando ella “quiera” y si quiere, no cuando lo hagas y quieras “tú” (“tú” no existe).

SER y NO SER. Todo es UNO. Todo siempre es UNO. El Ser no está separado del no-ser. El silencio no está separado del ruido. Las olas no están separadas del Océano. Lo relativo no está separado de lo Absoluto. SON lo mismo.

La cuestión es que no hay cuestión. Que no hay nada que responder. Que la Vida misma es la respuesta. Que la Vida misma ES tal y como ES. Que es imposible No Ser lo que Eres. Que sólo puedes Ser lo que no puedes dejar de Ser. Que eres una expresión del Todo. Ya Perfecta. Ya Iluminada. Sin nada que “llegar a Ser” para poder SER.

Es simple. El Advaita es muy simple. Tanto que no nos lo podemos creer.