Ruta de Sección: Inicio > Artículos >Ensayos > Artículo

Artículos - Chögyal Namkhai Norbu

Breve introducción al Sutra, Tantra y Dzogchen

Por Chögyal Namkhai Norbu 19 de noviembre de 2007
Chögyal Namkhai Norbu

Enseñanzas Dzogchen
"... no son una filosofía, ni una doctrina religiosa, ni una tradición cultural. Comprender el mensaje de las enseñanzas significa descubrir la verdadera condición de uno mismo, despojado de todo el autoengaño y las falsificaciones que crea la mente. El significado mismo del término tibetano Dzogchen, "Gran Perfección", se refiere al estado primordial de cada individuo y no a cualquier realidad trascendente"

Chögyal Namkhai Norbu,
de 'Dzogchen the Self-Perfected State'.

Sutra, el Sendero de Renunciación

Las tradiciones Hinayana y Mahayana del budismo tratan de lograr la experiencia de Sunyata, o del vacío, que es la suposición básica y el punto de partida del Tantra. Los caminos graduales insisten en que uno debe trabajar desde aquí en adelante. El Hinayana, o Pequeño Vehículo, y Mahayana, o Gran Vehículo, son partes del Sendero de Renunciación, pero sus enfoques característicos son diferentes. La tradición Hinayana del budismo sigue el Sendero de Renunciación que fue enseñado por el Buda en su forma humana y luego escrito en lo que se conoce como los "Sutras". Aquí el ego es considerado como un árbol venenoso, y el método aplicado es cómo desenterrar las raíces del árbol una por una. Uno tiene que superar todos los hábitos y tendencias que se consideran negativos y los obstáculos para la liberación. Así, en este nivel, existen muchas reglas de conducta, regidas por votos, que regulan todas las acciones de uno... A través del desarrollo de varios estados de meditación... (uno puede) recrearse como un ser puro que ha ido más allá de las causas del sufrimiento, un "Arhat", que ya no retornará más a la rueda de nacimientos y muertes en la existencia condicionada.

Desde el punto de vista del Mahayana, buscar la salvación de uno solo de esta manera, e ir más allá del sufrimiento mientras otros continúan sufriendo, no es lo ideal. En el Mahayana se considera que uno debe trabajar por un bien mayor, poniendo el deseo de realización de todos los demás antes de la propia realización y, de hecho, volver continuamente a la rueda de sufrimiento para ayudar a otros a ir más allá. A quien practica de esta manera se le llama "Bodhisattva"... Cortar las raíces del árbol lleva mucho tiempo, y el Mahayana se esfuerza más por cortar la raíz principal y luego deja que las otras raíces se marchiten por sí mismas al desarrollar la compasión suprema en el individuo, así como se esfuerza por realizar la vacuidad esencial de todos los fenómenos y el ego, que también es la meta en el Hinayana.

Tantra, el Sendero de Transformación

Los diversos niveles del tantra son las prácticas del Vajrayana, y trabajan en el supuesto de la vacuidad de todos los fenómenos, el principio de Sunyata. Todos trabajan sobre este principio utilizando la visualización, pero la visualización se usa de manera diferente en cada nivel, con el objetivo de reintegrar la energía del individuo con la del universo. Hay tantras externos e internos, también llamados tantras inferiores y superiores. Ambos niveles del tantra utilizan la visualización como un medio principal, pero los tantras externos comienzan a trabajar en el nivel de la conducta externa del practicante para lograr la purificación del pensamiento y la acción y así preparar al practicante para recibir la sabiduría. Los tantras externos comienzan así con lo que se llama el Sendero de Purificación, la primera etapa del Vajrayana, o "Vehículo Indestructible".

La segunda etapa del Vajrayana es el Sendero de Transformación, que comienza con el tercer y último nivel de los tantras externos e incluye los tres niveles de los tantras internos. Estos tantras internos trabajan una vez más en el supuesto básico de la vacuidad de todos los fenómenos, pero principalmente utilizan el yoga interior, trabajando en el sistema de energías sutiles del cuerpo, para lograr una transformación de toda la dimensión del practicante en la dimensión del ser realizado visualizado en la práctica. Estos métodos fueron enseñados por el Buda en un "cuerpo de manifestación", en lugar de hacerlo en su cuerpo físico, así como por otras manifestaciones del Sambhogakaya (Cuerpo de gozo).

Dzogchen, el Sendero de Auto-Liberación

El método particular del Dzogchen se denomina el Sendero de Auto-Liberación, y para aplicarlo, no es necesario renunciar, purificar o transformar nada. Cualquier cosa que surja como la visión kármica de uno se usa como el sendero. El gran maestro Pha Tampa Sangye [Yogui del sur de la India del siglo XI (ed.)] dijo una vez: no son las circunstancias que surgen como la visión kármica de uno lo que condiciona a una persona al estado dualista; es el propio apego de la persona lo que permite que lo que surja lo condicione. Para romper este apego de la manera más rápida y efectiva, se debe poner en juego la capacidad espontánea de la mente para auto liberarse. Sin embargo, el término auto-liberación no debe interpretarse en el sentido de que existe un "yo" o ego para ser liberado. Es una suposición fundamental... en el nivel del Dzogchen, que todos los fenómenos están desprovistos de naturaleza propia.

La "auto-liberación", en el sentido del Dzogchen, significa que todo lo que se manifiesta en el campo de experiencia del practicante se permite que surja tal como es, sin juzgarlo como bueno o malo, bello o feo. Y en ese mismo momento, si no hay aferramiento, o apego, sin esfuerzo, ni siquiera volición, sea lo que sea que surja, ya sea un pensamiento o un acontecimiento aparentemente externo, automáticamente se libera a sí mismo, por sí mismo y de sí mismo. Practicando de esta manera las semillas del árbol venenoso de la visión dualista nunca tendrán la oportunidad de brotar, y mucho menos de echar raíces y crecer.

Ni Sutra, ni Tantra, el Dzogchen no se ve a sí mismo como el punto más alto de una jerarquía de niveles, y no es un camino gradual. El Dzogchen es el Sendero de Auto-Liberación, y no el Sendero de Transformación, por lo que no usa la visualización como práctica principal; pero está más allá de los límites, y las prácticas de cualquiera de los otros niveles pueden usarse como prácticas secundarias. La práctica principal del Dzogchen es entrar directamente en la contemplación no-dual, y permanecer en ella, continuar profundizándola hasta que uno alcanza la Realización Total.